EL FONÓGRAFO
El fonógrafo fue el primer dispositivo más común para grabar y reproducir sonidos desde la década de 1870 hasta la década de 1880. Thomas Edison fue quién consiguió en 1877 reproducir el sonido grabado del dispositivo.
La finalidad del dispositivo era facilitar los dictados en las oficinas de trabajo. El fonógrafo surgió como un gran invento para la grabación y reproducción de sonido, y con este se intentaron grabar algunas canciones, en cambio no era muy eficaz para los músicos y su reproducción era muy lenta. Años más tarde, en 1888, Emilio Berliner inventó el gramófono, que acabó con la popularidad del fonógrafo. Con el nuevo invento, se podían hacer muchas copias de una grabación en muy poco tiempo, aunque el fonógrafo tenía una mejor calidad de sonido. Thomas Edison no se dio por vencido y mejoró su invento. Ya en el siglo XX perdió mucha popularidad el fonógrafo a causa de su batalla contra el gramófono, pero más tarde también surgieron otros dos inventos que dejaron de lado a estos dos últimos. Estos nuevos inventos son el disco de vinilo y el CD digital.
Actualmente el fonógrafo ha perdido su uso debido a los nuevos inventos tecnológicos del sonido
